Algunas causas de la pobreza en todo el mundo incluyen la falta de control sobre los recursos locales, la alta densidad de población, la falta de acceso a la educación y la inestabilidad conyugal. La deuda nacional, la vulnerabilidad a los desastres naturales y los precios inestables de los alimentos también contribuyen a la pobreza.
Los países que no controlan los recursos locales son más susceptibles a la pobreza porque los recursos valiosos se explotan y exportan a las naciones más ricas sin que los pobres se beneficien de esos recursos.
Las altas poblaciones ejercen presión sobre los recursos disponibles en un país. Los recursos solo pueden soportar un cierto número de personas. Los recursos insuficientes para una gran población dan como resultado precios altos y hacen que las personas de bajos ingresos no tengan acceso a alimentos, energía o atención médica.
La inestabilidad marital y la discriminación de género son las principales fuentes de pobreza entre las mujeres. Son un factor importante para mantener en situación de pobreza a muchas mujeres y niños en todo el mundo.
La deuda nacional a menudo induce al Banco Mundial y al Fondo Monetario Internacional a exigir que las naciones más pobres abran sus mercados a empresas e inversores externos, lo que aumenta la competencia con las empresas locales.
La vulnerabilidad a los desastres naturales, incluidas las sequías, las lluvias y las inundaciones, son algunas de las causas de la pobreza causada por el clima. Los gobiernos a menudo dedican recursos al desarrollo de ciudades capitales en lugar de expandir la infraestructura en más regiones provinciales. Cuando ocurren desastres naturales, las áreas no desarrolladas tardan más en reconstruirse y el progreso social se retrasa.