Hércules era un hombre extremadamente fuerte y siempre fue representado en las mejores condiciones físicas en el arte antiguo. A veces se lo mostraba con una barba, y muy a menudo, las estatuas lo representaban con manos y pies desproporcionadamente grandes.
La fuerza de Hércules vino de su padre Zeus, el gobernante de todos los dioses. Hércules era un semidiós, lo que significa que era mitad humano y mitad dios. Esto explica su fuerza y apariencia muscular, pero la identificación de una imagen de Hércules puede ser difícil, ya que hay otros tipos de "personajes" musculosos en el repertorio de arte antiguo, como el atleta.
Un indicador claro de si un tema en el arte antiguo es Hércules son sus atributos. Los atributos son objetos que acompañan imágenes de dioses y semidioses para aclarar la identidad del sujeto. Los atributos de Hércules eran un club de aspecto rudo y una piel de león, que usaba después de completar el primero de sus doce trabajos. Estos dos objetos eran completamente exclusivos de Hércules, y ningún otro personaje se mostraba con ellos.
Las representaciones de Hércules a menudo muestran sus doce labores. Las labores más utilizadas en el arte antiguo son aquellas en las que Hércules mató al león nemiano, mató a la hidra, se apoderó del jabalí de Erymanthian, ahuyentó a las aves de Stymphalion y capturó Cerberus.