Según el zoológico de San Diego, los tejones de miel viven hasta 26 años en cautiverio. Su vida en la naturaleza es desconocida. Este animal, cuyo nombre propio es "ratel", es parte de la familia de las comadrejas.
El nombre popular "tejón de miel" proviene del hábito de la criatura de atacar colmenas para comer las larvas de abejas que se encuentran en la miel. Los tejones de miel tienen una piel gruesa que les permite soportar púas de puercoespín, mordeduras de animales y picaduras de abejas. Son luchadores feroces y son resistentes a los efectos del veneno de serpiente. Estas cualidades, combinadas con el poder de su olor nocivo, ayudan a asegurar la supervivencia de los tejones de miel.