San Agustín de Hipona ofrece una interpretación clásica del Salmo 91, que él ve como un estímulo para el coraje y la confianza en Dios en medio del sufrimiento y las trampas del mal. Señala que el diablo lo utilizó Salmo para tentar a Jesús, y así le da un significado cristológico.
Según San Agustín, este salmo no solo alienta a quienes se enfrentan al mal o al sufrimiento, sino que también muestra de manera implícita que aquellos que no confían en Dios recurren a estos poderes malignos. Además, señala que la protección de Dios se extiende no solo a los que van en contra de los medios de resistencia visibles y abiertos, sino también en contra de las sugerencias solitarias del diablo.
Gran parte de la exposición de Agustín consiste en interpretar las líneas individuales del salmo. Por ejemplo, interpreta que los versos sobre la oscuridad de la noche se refieren a los pecados en la ignorancia, y la flecha del día como a los pecados cometidos con pleno conocimiento.
St. Agustín saca conclusiones adicionales sobre el significado y el alcance de la protección de Dios mediante una comparación con el uso del salmo por el diablo contra Jesús en Mateo 4. Aquí, Jesús reprende el uso del pasaje del diablo para poner a prueba a Dios, y de esta narrativa Agustín concluye, además, que la protección garantizada a quienes miran a Dios incluye a los humildes, no a los orgullosos ni a quienes confían en su propio poder.
