Los chihuahuas son perros leales, valientes, juguetones y felices. A la mayoría de los chihuahuas les encanta ladrar cualquier cosa y todo.
La socialización adecuada puede ayudar a frenar el comportamiento de ladridos de los chihuahuas. La raza tiende a vincularse con una persona de la familia y puede molestar a otros miembros de la familia, especialmente a los niños, por celos. La capacitación con refuerzo positivo y afecto es la clave para asegurarse de que un Chihuahua se comporte bien.
Otro aspecto del comportamiento típico de un chihuahua es su valentía. Los chihuahuas tienden a no darse cuenta de lo pequeños que son y no tienen miedo cuando defienden a sus dueños contra perros más grandes. Sus acciones defensivas van desde ladridos incesantes hasta morder, pero la socialización adecuada con las personas y con otros perros los hace sentir menos ansiosos y más cómodos.