Conciencia cultural - Consejos importantes para el éxito

Conciencia cultural - Consejos importantes para el éxito

La conciencia cultural implica reconocer las diferentes creencias, valores y costumbres que tienen otras personas que se basan en sus orígenes o educación. La conciencia cultural posiciona a las personas para que tengan más éxito en las relaciones personales y profesionales.

Origen y experiencias personales moldean creencias, valores y costumbres. La conciencia cultural es la capacidad de notar y respetar estas diferencias. Mostrar consideración por las normas culturales de los demás hace que una persona sea más hospitalaria en un país de origen y esté mejor equipada para adaptarse cuando viaja al extranjero.

Ejemplos de diversidad cultural

Para garantizar el respeto de las diferentes culturas, las personas primero deben ser conscientes de las diferencias culturales. La raza y la etnicidad son las principales diferencias culturales que influyen en las actitudes y comportamientos, según lo declarado por un representante de la Universidad de Walden. La nacionalidad de una persona a menudo define sus creencias, pensamientos, intereses y perspectivas. La religión, el estatus económico e incluso la orientación sexual también son partes integrales de las identidades y los sistemas de creencias de las personas. Mostrar sensibilidad ante las diferencias e invitar a otros a compartir sus experiencias culturales puede ser una forma efectiva de fomentar la conciencia cultural y los sentimientos de inclusión.

Mostrando respeto por la diversidad

La práctica de la conciencia cultural de los demás extiende el respeto a las personas de diferentes culturas. La conciencia cultural también implica realizar ajustes y adaptaciones según sea necesario en diferentes situaciones sociales y profesionales. Algunas culturas, como los Estados Unidos, practican una comunicación más abierta y directa, mientras que otras culturas son más sutiles y reservadas en sus estilos de comunicación. Podría ser fácil para alguien ofender involuntariamente a alguien más con un entorno cultural diferente con un estilo de comunicación demasiado directo. En el lugar de trabajo, la diversidad presenta tanto oportunidades como desafíos. Las diferentes perspectivas permiten que los equipos de trabajo discutan más opciones para lograr mejores resultados. El uso de la sensibilidad y la flexibilidad ayuda a las personas a navegar en diversas situaciones sociales y profesionales para evitar ofender a los demás.

Etiqueta cultural

Los empleados deben utilizar la sensibilidad por la influencia de la cultura tanto en la comunicación como en la etiqueta. La etiqueta cultural a menudo tiene diferencias significativas, que presentan desafíos para las personas que intentan trabajar juntas. Por ejemplo, el contacto visual regular es un signo de compromiso cuando las personas se comunican en los Estados Unidos. Sin embargo, el contacto visual puede ser percibido como dominante e irrespetuoso en Japón, según Rebecca Bernstein de la Universidad de Point Park. De hecho, los japoneses a menudo muestran respeto por los demás al evitar el contacto visual. Por lo tanto, moderar el contacto visual puede ayudar a los estadounidenses a establecer una buena relación y respeto mutuo al comunicarse con personas de herencia japonesa. En los Estados Unidos, las personas mantienen un ritmo acelerado y, a menudo, se saludan profesionalmente con firmes apretones de manos. Sin embargo, en Francia, los profesionales tienden a ser más relajados e informales, generalmente se saludan con besos en ambas mejillas. En América, esta práctica parecería inapropiada; sin embargo, en Francia, las personas pueden sentirse ofendidas por la ausencia de un beso.

Reconocer las diferencias culturales y aceptar estas diferencias de manera respetuosa y afirmativa ayuda a todos a sentirse valorados. Debido a que los viajes en todo el mundo son fácilmente accesibles, es probable que más personas experimenten situaciones que exigen conciencia cultural en sus interacciones con los demás. La capacidad de tener una comunicación verbal y no verbal positiva con otras personas que tienen diferentes antecedentes y creencias amplía las perspectivas y mejora la capacidad de colaborar de manera efectiva.