¿Cómo se produce la lluvia ácida?

La lluvia ácida es el subproducto de una reacción química que comienza cuando los gases de óxido de nitrógeno y dióxido de azufre se liberan a la atmósfera, donde reaccionan con el oxígeno, el agua y otros productos químicos para formar contaminantes ácidos. Las reacciones pueden tomar horas o días, durante los cuales el aire contaminado puede moverse varias millas; por lo tanto, la lluvia ácida puede caer lejos de la fuente de contaminación.

La lluvia ácida a veces se denomina deposición ácida, un término que también abarca otras formas de precipitación ácida como la nieve. Puede ocurrir como resultado de actividades tanto humanas como naturales. La mayoría de los gases que conducen a la lluvia ácida son, típicamente, subproductos de la quema de combustibles fósiles y la generación de energía eléctrica. Los volcanes en erupción también liberan sustancias químicas que conducen a la deposición de ácidos.

La lluvia ácida conduce a la acidificación de arroyos y lagos, lo que pone en peligro la vida acuática. También conduce a la destrucción de árboles y suelos sensibles del bosque. La deposición ácida tiene impactos negativos en la arquitectura porque acelera la descomposición de las pinturas y los materiales de construcción. Cuando la lluvia ácida cae sobre un edificio, comienza a reaccionar lentamente con los minerales en las piedras, causando que se desintegren gradualmente y eventualmente se eliminen. Existen múltiples formas de frenar la deposición de ácidos, desde la acción individual hasta los cambios sociales.