La presión del aire se mide utilizando un barómetro, cuyo valor se da en unidades variables, incluidas pulgadas de mercurio (en Hg) o milímetros de mercurio (mm Hg), torr (Tor), barras o milibares (mb), libras por pulgada cuadrada (psi) y pascal (Pa). La atmósfera estándar, que se refiere a la presión atmosférica del nivel del mar a 0 grados Celsius, se expresa en atmósferas, generalmente abreviadas a atm. Una atm es igual a 29.92 en Hg, 760 mm Hg, 760 Tor, 1.013 bar, 1,013.25 mb, 14.7 psi y 101,325 Pa.
La presión del aire se refiere a la fuerza que ejerce la atmósfera terrestre en un área de superficie unitaria. Dependiendo de la ubicación geográfica, las presiones atmosféricas cambian constantemente. Las regiones de mayor elevación tienen presiones de aire más bajas en comparación con las áreas más cercanas al nivel del mar.
Hay varios tipos de instrumentos barométricos que miden la presión del aire. El primer barómetro mercurial, inventado en 1643, consistía en un tubo de vidrio volcado que contenía mercurio. A medida que aumenta la presión del aire, el nivel de mercurio aumenta dentro del tubo. La presión se mide tomando la altura del mercurio, que generalmente se registra en pulgadas. En lugar de usar mercurio, los barómetros modernos encuentran la presión atmosférica empleando cargas eléctricas. Otro tipo de barómetro se llama barómetro aneroide. Las variaciones en la presión del aire se miden en función de si las obleas selladas dentro del dispositivo se expanden o contraen. Los aumentos en la presión se indican cuando las obleas se encogen, mientras que las disminuciones en la presión se determinan cuando las obleas crecen en tamaño. Medir la presión del aire es una característica importante en el pronóstico del tiempo.