¿Cómo se comunican los elefantes?

Los elefantes se comunican principalmente a través de llamadas vocales, aunque también usan otros métodos importantes. Estos incluyen comportamientos táctiles, como tocar, así como la congelación sincronizada. Los elefantes también se comunican a través de la secreción de sustancias químicas específicas que otros miembros de la manada pueden detectar a través del avanzado sentido del olfato del elefante.

Los elefantes utilizan las llamadas vocales en una amplia variedad de escenarios, que incluyen el cuidado de los jóvenes, la resolución de disputas y la reunión de la manada para la marcha. Los elefantes pueden reconocer las llamadas individuales de cientos de otros elefantes desde una media milla de distancia, y muchos de los sonidos creados por los elefantes existen en un rango no disponible para los oídos humanos, según PBS.

En el rango sensual de expresión, el tacto es vital para la salud de las comunidades de elefantes, siendo el tronco el instrumento principal. El uso del tronco puede transmitir afecto, aumentar la conexión durante el apareamiento y reforzar los vínculos sociales. Los elefantes prestan atención a los muertos al usar sus troncos para tocar los huesos y restos de otros elefantes.

La congelación sincronizada es un fenómeno por el cual los elefantes se detienen y alcanzan sus sentidos colectivamente, lo que les permite explorar el entorno en busca de ruidos y olores desconocidos o amenazantes. Los elefantes también utilizan una amplia variedad de posturas para transmitir información. Si bien la causa del aleteo de las orejas puede ser algo tan pragmático como avivar en climas cálidos, también puede indicar la felicidad o la alegría de un elefante. Además, las orejas muy extendidas y una cabeza elevada pueden mostrar un alto estatus social, mientras que un elefante socialmente subordinado lleva la cabeza hacia abajo y las orejas clavadas. Finalmente, una cola levantada y un mentón pueden comunicar miedo o alarma al grupo, como en la presencia de un depredador.