Una oración musulmana se realiza después de una serie de preparativos, que incluyen limpiar y preparar un lugar limpio para orar. Las oraciones se realizan cinco veces al día mientras se enfrentan a la dirección llamada qiblah, que representa la ubicación de la Ka'aba en la ciudad de Arabia Saudita de La Meca.
Una mezquita está diseñada y construida de modo que un lado del edificio esté frente a la qiblah, lo que facilita la organización de las oraciones diarias para que los fieles puedan orar en filas. Típicamente, el lado de la mezquita que enfrenta a la qiblah está marcado con un adorno llamado el mihrab. La oración musulmana no se hace para adorar a la Ka'aba, pero la Ka'aba sirve como punto focal y capital espiritual. La oración musulmana adora a Alá.
Antes de comenzar las oraciones, un musulmán debe asegurarse de que su cuerpo esté limpio realizando abluciones, lavando ciertas partes del cuerpo con agua según sea necesario. La oración musulmana incorpora múltiples postraciones y posiciones de pie, todo esto mientras se recita la oración en árabe.
La tradición musulmana define cinco momentos de oración separados a lo largo del día. Las oraciones formales se realizan durante un período de tiempo entre el comienzo de un tiempo de oración y el comienzo del siguiente tiempo de oración. Mientras que una alfombra de oración se usa a menudo durante las oraciones musulmanas, no es obligatorio.
