La única forma efectiva de proteger el esmalte de uñas cuando duermes es abstenerte de dormir hasta que el esmalte esté seco. Si el esmalte aún está pegajoso, puede manchar y arruinar las sábanas. Reduzca el tiempo de secado del esmalte aplicando una capa de acabado de secado rápido o rociando las uñas con un spray de fijación para manicuristas.
El esmalte de secado rápido es otro producto de manicura útil que ahorra tiempo y protege las uñas durante el sueño. Comience con una capa base transparente, luego aplique una capa de esmalte. Termine con una capa final de secado que incluya ingredientes endurecedores. Estas capas superiores promueven el secado rápido y no se astillan, lo que prolonga la vida útil de la manicura. Para la mejor protección, aplique una capa de acabado adicional en las puntas de las uñas, incluidos sus lados inferiores.
Otra táctica protectora es poner agua helada sobre las uñas pulidas después de que parecen estar secas. Si el agua fría del grifo no está disponible, llene un recipiente con agua fría y agregue cubitos de hielo y 2 cucharadas de sal. Revuelva y espere a que el hielo se disuelva antes de meter sus dedos en el agua. Alternativamente, quite los cubitos de hielo parcialmente derretidos con una cuchara ranurada. Esto evita que los cubos se peguen en el esmalte de secado y creen gubias o manchas.
El esmalte de uñas tarda 24 horas en secarse por completo, incluso cuando se trata con capas de secado, gotas y aerosoles. Después de este período, aplique una capa protectora transparente todos los días para mantener el esmalte vibrante, brillante y hermoso.