En la tradición del paganismo moderno, conocido como Wicca, lanzar un hechizo depende del ritual, el tiempo y la fuerza de la voluntad del lanzador. Se enfatiza la preparación y el enfoque, al igual que la eliminación de la energía negativa y la invitación a la energía positiva.
Wicca es solo una de las muchas tradiciones de magia practicada en todo el mundo. Hoodoo y otras tradiciones con orígenes no occidentales tienen diferentes marcos dentro de los cuales se pueden lanzar conjuros o se pueden realizar rituales.
No hay un proceso ritual único para lanzar un hechizo. Es importante que el lanzador encuentre su propio proceso que fortalezca sus poderes y enfoques personales y que se adapte a sus capacidades. Quemar incienso, meditar, inscribir runas y otras prácticas son comunes. También es común la invocación de varios dioses según las preferencias personales. Una vez que estas cosas están en su lugar, el lanzador debe centrarse en el resultado que desea. Cuanto más lejos esté este lanzamiento del momento crucial en que este resultado podría materializarse o colapsarse, más probable es que, según los practicantes, el resultado sea favorable para el lanzador.
Un concepto importante en la práctica de la magia es la triple ley. Esta ley sostiene que cuando la magia se hace al bien, es caritativo, desinteresado o útil, los beneficios se triplicarán. Lo contrario es cierto para el daño de la magia. La Wiccan Rede, una ley comúnmente seguida, es el precepto de que las acciones que no dañan a nadie son los únicos hechizos permitidos para lanzar.