Los budistas no creen que el mundo haya sido creado, sino que simplemente ha existido para siempre y continúa recreando. Las enseñanzas budistas afirman que el mundo está en un estado constante de Samsara, es decir, la Repetición del nacimiento y la muerte.
Los budistas creen que las energías humanas y la naturaleza son interdependientes y que siempre han estado fluyendo juntas para siempre. Las enseñanzas budistas afirman que no hay una verdad absoluta cuando se trata del principio del mundo. Creen que el universo y sus habitantes son infinitos y que los sistemas mundiales aparecen y desaparecen continuamente dentro de la estructura universal.
Los budistas no creen en un solo dios. Ellos creen que no hay evidencia para apoyar que un ser solitario gobierne sobre el vasto universo. Creen en una humanidad colectiva en la que cada persona tiene la capacidad de convertirse en un Buda, es decir, en un ser humano perfeccionado.
Los budistas creen en la reencarnación y la ley del karma. La ley del karma establece que el buen comportamiento y las intenciones producen resultados positivos, mientras que el comportamiento y las intenciones negativas en última instancia conducen a un resultado negativo. Los budistas creen que el alma está en un viaje continuo hacia varios niveles de iluminación. Se refieren a la vida futura como "el punto intermedio", un lugar donde existen las almas después de la muerte y antes del renacimiento.
