Las mandíbulas dislocadas se pueden tratar con procedimientos de reducción manual en los que la mandíbula se mueve físicamente hacia atrás y se ajusta con bandas o alambres que evitan el movimiento de la mandíbula, según Drugs.com. Se puede necesitar cirugía para alinear correctamente la mandíbula.
Las dislocaciones menores de la mandíbula a menudo se pueden tratar envolviendo un vendaje alrededor de la cabeza y debajo de la barbilla, ya que esto ayuda a dificultar el movimiento de la mandíbula, explica Healthline. Los analgésicos de venta libre, como el naproxeno o el ibuprofeno, también pueden ayudar a calmar el dolor y la hinchazón. La recuperación de una mandíbula dislocada puede demorar hasta seis semanas, durante las cuales es importante que los pacientes mantengan sus mandíbulas inmóviles y eviten comer alimentos que requieran una masticación significativa, ya que esto puede empeorar los síntomas.
Es importante que las personas con síntomas de mandíbula rota o dislocada busquen tratamiento médico inmediato, ya que las afecciones pueden causar dificultad para respirar y sangrado severo, señala MedlinePlus. Las complicaciones adicionales de una mandíbula rota o dislocada incluyen dificultades para hablar, dificultades para comer temporalmente e infecciones de la mandíbula. Los síntomas de una mandíbula dislocada incluyen babeo, dificultad para cerrar la boca y dientes desalineados. Los síntomas de una mandíbula rota incluyen rigidez, hinchazón de la cara, dientes flojos, hinchazón de las mejillas y sangrado de la boca.