Los colores pueden afectar la forma en que las personas se sienten, la forma en que reaccionan a diferentes situaciones e incluso pueden afectar el apetito de algunas personas. Los colores a menudo se asocian con lugares y objetos que pueden desencadenar respuestas emocionales en gente.
El negro es uno de los colores más comunes asociados con la emoción. A menudo significa un cierto poder y autoridad, pero también puede significar la sumisión. El negro también está asociado con los villanos y puede representar el mal.
El azul es otro color popular que afecta la forma en que las personas se sienten. Azules más claros están asociados con el océano y el cielo azul. Pueden hacer que las personas se sientan más pacíficas y tranquilas. También se ha demostrado que el azul reduce el apetito de muchas personas. Ciertos azules pueden ser fríos y deprimentes.
El rojo tiene el efecto opuesto al azul. Puede hacer que la sangre fluya y puede aumentar los latidos del corazón en muchas personas. El rojo es el color del amor y puede estimular los sentimientos de amor en las personas. También se ha demostrado que el rojo aumenta el apetito de las personas.
El blanco es un color que implica pureza y esterilidad. Es capaz de crear una sensación de luz y ventilación y puede hacer que las personas se sientan más libres, aunque fácilmente acumula suciedad.