La astenosfera no tiene un tamaño exacto, pero el Servicio Geológico de los Estados Unidos estima que tiene un espesor de aproximadamente 111.85 millas (180 kilómetros). Es muy dúctil, lo que significa que puede cambiar de forma y, por lo tanto, depende del condiciones.
La astenosfera se encuentra justo debajo de la litosfera, que está formada por la corteza terrestre y la parte superior del manto. La astenosfera constituye el resto del manto.
La razón por la que la astenosfera es tan dúctil se debe a su proximidad al intenso calor generado por el núcleo de la Tierra. El calor geotérmico creado por el núcleo mantiene a la roca en la astenosfera en un estado semilíquido en todo momento.
