En general, los grillos simbolizan buena suerte y protección. En la cultura china, se considera mala suerte dañar a un grillo, ya que su chirrido sirve como advertencia de protección contra un peligro potencial. También se sabe que los grillos simbolizan la intuición debido a sus largas antenas, que les dan un mayor sentido de sensibilidad.
Durante la dinastía Tang de China, los grillos a menudo se mantenían como mascotas. Los grillos fueron capturados por las concubinas del emperador y colocados en jaulas de oro. Las jaulas se instalaron junto a sus camas para que los grillos las cantaran para dormir. Hoy en día, los grillos se siguen vendiendo, como mascotas o amuletos de buena suerte, en los mercados.