La ropa azteca estaba hecha de algodón y fibra, extraída de las hojas de cactus Maguey. Las mujeres jugaron el importante papel de tejer ropa usando fibra, y aprendieron esto desde una edad temprana. Usaron diferentes colores para teñir la ropa y darles diseños intrincados. El algodón solía estar reservado para los nobles de la comunidad, se dice que un plebeyo podría ser condenado a muerte si llevara ropa de algodón.
La ropa para la gente común y los esclavos no cubría todo el cuerpo. La ropa de fibra de maguey fue utilizada principalmente por los esclavos y los plebeyos. Los esclavos solo llevaban un taparrabos simple. El taparrabos para la gente común estaba hecho de un pedazo largo de tela. Los hombres también llevaban un manto para cubrir los hombros y caminaban descalzos o tenían sandalias hechas de fibra de maguey. Las mujeres llevaban una falda llamada Cueitl, que estaba hecha de una tira larga de tela y una blusa sin mangas.
La clase alta usaba ropa prestigiosa con símbolos de su autoridad o afiliación. El oro se añadía a menudo a la ropa. Para la decoración se utilizaron pieles, colgantes y plumas. También llevaban un tocado decorado con símbolos. La clase alta también llevaba joyas, como brazaletes, collares y aretes.
