Para sobrevivir, las plantas de ciclamen necesitan estar a la temperatura adecuada y requieren cantidades correctas de luz, agua, fertilizantes y espacio para crecer. La mayoría de los ciclamen sobreviven mejor en interiores debido a sus crecientes requisitos. .
Las plantas de ciclamen pasan por ciclos de un período inactivo y un período de floración. Durante el período de inactividad, las hojas amarillearán y caerán, pero con el cuidado adecuado, la planta volverá a florecer en unos pocos meses. Para cuidar una planta de ciclamen de interior:
- Mantenga la temperatura adecuada
- Proporciona suficiente espacio
- Proporcione suficiente agua
- Proporciona luz
- Fertilize
Las plantas de ciclamen requieren ambientes fríos y húmedos para crecer, y las temperaturas deben estar entre 50 y 68 grados Fahrenheit para que prosperen.
Proporcione una maceta lo suficientemente grande que tenga un drenaje adecuado y llénela con una mezcla para macetas con base en el suelo.
No riegue en exceso las plantas de ciclamen bajo el agua, y empape bien la tierra una vez que esté seca al tacto. Solo riegue el suelo, no el tallo ni las hojas, ya que esto puede conducir a la pudrición. No riegue durante los meses de inactividad cuando las hojas no estén en la planta.
A las plantas de ciclamen les va bien bajo el sol pleno y filtrado en el invierno, pero el sol pleno de verano es demasiado fuerte y hará que las hojas se caigan prematuramente.
Aplique un fertilizante soluble en agua a media potencia cada 1 o 2 meses. Demasiado fertilizante puede impedir que la planta vuelva a florecer.
Las plantas de ciclamen florecen durante los meses de invierno y necesitan que las bolas de la raíz se mantengan húmedas en todo momento. También se les debe dar alimento para las plantas una vez cada 2 semanas. La mejor manera de asegurarse de que las raíces se mantengan húmedas es usar una bandeja de riego debajo de la planta.
Cuando la planta termina su proceso de floración, los brotes se pueden recortar. Una vez hecho esto, la planta debe dejarse sola para que se seque, con la opción de colocarla en verano y colocarla en un lugar cálido para facilitar nuevamente el proceso de floración.