El colon, también conocido como el intestino grueso, elimina el exceso de nutrientes para formar heces y transporta este producto al recto. Este órgano es parte del sistema digestivo y es esencial para la eliminación residuos.
El colon se divide en cuatro partes. La primera parte es el colon ascendente, que viaja hacia el lado derecho del abdomen. A continuación, se encuentra el colon transverso que atraviesa el abdomen. La tercera sección es el colon descendente, que se desplaza por el lado izquierdo del abdomen. Finalmente, está la sección sigmoidea, que conduce al recto.
El funcionamiento interno del colon incluye músculos que alinean las paredes. Estos músculos son responsables de mover las heces a lo largo. El colon también está cubierto con muchas bacterias, que ayudan en la digestión.
Aunque es esencial para la funcionalidad general del cuerpo, el colon es susceptible a muchas enfermedades. Una de las más comunes es la colitis, en la cual el colon se inflama. Como muchos otros órganos, el colon es susceptible al cáncer; sin embargo, los exámenes regulares pueden hacer que el cáncer de colon se pueda prevenir. Los tratamientos comunes para el colon incluyen probióticos, antibióticos y una colonoscopia, que involucra herramientas que se colocan en un endoscopio. Este procedimiento se puede utilizar para tratar el cáncer.