Un ejercicio de mapeo es un procedimiento cartográfico que se utiliza para evaluar un área para la creación de un mapa. Un mapa exitoso debe indicar formaciones de terrenos naturales y otras áreas de interés o preocupación.
El proceso de mapeo usa patrones de datos que se representan visualmente en el mapa usando símbolos, colores y gráficos. Los ejercicios de mapeo suelen ser realizados por cartógrafos, geógrafos y especialistas en información geográfica.
Con frecuencia, se debe asignar un área al planificar la construcción, exploración o navegación del entorno. De esta manera, el mapa sirve como un plan y una guía para la planificación urbana, la evaluación del impacto ambiental u otros procedimientos. El ejercicio de mapeo debe resultar en una comprensión de las principales características del área. Por ejemplo, los mapas topográficos evalúan las características culturales y físicas del área.