Un circuito convergente es uno de varios circuitos neuronales en el cuerpo, y tiene una serie de neuronas presinápticas que estimulan una neurona postsináptica. Por ejemplo, una neurona motora recibe información de muchas regiones del cerebro para realizar una determinada acción.
Los circuitos divergentes son otro tipo de circuito neuronal en el sistema nervioso, y comprenden una neurona presináptica que funciona para estimular una serie de neuronas postsinápticas, esencialmente lo opuesto a un circuito convergente. Un ejemplo de esto es cuando una única señal sensorial llega al cerebro y luego recibe reacciones de varias regiones.
Un circuito oscilante es también un circuito neuronal, y en este caso, el circuito estimula una sola neurona presináptica, causando una serie de impulsos postsinápticos. Esto ayuda al cuerpo a realizar acciones que requieren movimientos musculares coordinados, como la respiración.
Otro circuito neuronal, un circuito paralelo posterior a la descarga, tiene una única neurona presináptica que estimula a otras neuronas. Cada una de estas neuronas termina en una sola neurona postsináptica. Esta acción envía una serie de impulsos rápidos a través del sistema a la vez.
A partir de 2015, se considera que estos circuitos neuronales, cuando actúan de manera anormal, pueden causar epilepsia. Esta es una condición donde las descargas neuronales en el cerebro no son normales, lo que lleva a convulsiones y movimientos musculares incontrolados.