Conceptos básicos sobre la transaminitis El hígado trabaja para filtrar las toxinas y descomponer los nutrientes para que el cuerpo tenga lo que necesita y elimina lo que no debería estar allí. Las enzimas son las que aseguran que es capaz de trabajar de manera eficiente. Cuando los niveles de enzimas en el hígado suben demasiado, viajan al torrente sanguíneo. Las transaminasas son algunas de las enzimas más importantes responsables de ayudar al hígado, y los dos tipos que juegan un papel más importante en la transaminitis incluyen la aspartato transaminasa y alanina transaminasa, dice la Academia Americana de Médicos de Familia.
La mayoría de los pacientes con esta afección desconocen su presencia debido a que no se presentan los síntomas. Esta condición no causa síntomas directamente, pero se usa como una herramienta de diagnóstico. En algunos casos, las enzimas hepáticas se elevan por poco tiempo sin una causa subyacente. Sin embargo, ciertas afecciones potencialmente crónicas también pueden provocarlo, como hepatitis o enfermedad hepática. Ciertos medicamentos también pueden causar este problema, como analgésicos de venta libre, medicamentos cardiovasculares, estatinas para el colesterol alto y antidepresivos cíclicos. Debido a esto, los médicos generalmente realizan pruebas adicionales cuando hay transaminitis.
Alanine Transaminase La alanina transaminasa (ALT) es un tipo de enzima que se encuentra principalmente en las células del riñón y el hígado, afirma Medscape. Esta enzima toma alanina, que es un tipo de aminoácido ubicado en las proteínas y lo convierte en piruvato. Esto ayuda a asegurar la producción adecuada de energía celular. Cuando una persona está sana, los niveles de ALT en la sangre suelen ser bajos. Sin embargo, esta enzima se libera en la sangre cuando el hígado comienza a dañarse. Esto puede suceder antes de que la enfermedad hepática muestre algún síntoma obvio. Esto hace que las pruebas para esta enzima sean útiles para la detección temprana de daño o enfermedad hepática.
Si bien los problemas hepáticos son en su mayoría los motivos por los que los médicos deciden evaluar los niveles de ALT, otros problemas también podrían mejorarlo. El daño del músculo esquelético y del corazón puede causar elevación. Por ejemplo, después de un ataque cardíaco, los niveles de ALT pueden estar ligeramente elevados.
Aspartate Transaminase La aspartato transaminasa (AST) se encuentra en las células de todo el cuerpo, pero esta enzima está más concentrada en el hígado y el corazón, según Medscape. Funciona para desencadenar reacciones químicas en las que el cuerpo confía para una función óptima. Los niveles son generalmente bajos en aquellos que están sanos. Sin embargo, cuando las células musculares o hepáticas se lesionan, esto libera la enzima AST en la sangre, causando niveles elevados. Debido a esto, las pruebas de sangre para los niveles de AST pueden ser beneficiosas cuando los médicos buscan diagnosticar una enfermedad o daño hepático.
Los problemas hepáticos no son la única razón por la que esta enzima puede estar elevada. Otras razones incluyen el embarazo, el ejercicio vigoroso, las quemaduras agudas y la inyección de un medicamento o una vacuna en un músculo.
Pruebas de la función hepática Este es un tipo de análisis de sangre que se realiza para determinar los niveles de ALT y AST en la sangre. Es capaz de proporcionar a los médicos información sobre la salud y el funcionamiento general del hígado. Lo que se requiere es una pequeña muestra de sangre tomada mediante la inserción de una aguja en una vena. Esto se analiza en un laboratorio.