La inteligencia fluida es la capacidad de razonar rápido y de pensar de manera abstracta al resolver problemas. Es la capacidad de ver relaciones independientes de instrucciones, experiencias, aprendizaje y educación pasados relacionados con esas asociaciones.
La inteligencia consiste en varias habilidades y capacidades cognitivas. Hay dos tipos de inteligencia en psicología: inteligencia fluida y cristalizada. La inteligencia fluida, también conocida como razonamiento fluido, es la capacidad de razonar de manera lógica y resolver problemas, independientemente del conocimiento o experiencia adquiridos. Implica la capacidad de resolver acertijos y diseñar estrategias para resolver problemas. La inteligencia fluida es la capacidad de analizar problemas nuevos, predecir patrones y relaciones que influyen en estos problemas y la aplicación de la lógica para resolverlos. Hay dos formas de razonamiento fluido: razonamiento inductivo y razonamiento deductivo. Mientras que el razonamiento fluido implica la capacidad actual de razonar y manejar situaciones complejas, la inteligencia cristalizada implica el uso de experiencias, conocimientos y habilidades pasadas. Las circunstancias que requieren inteligencia cristalizada incluyen la lectura para los exámenes. Esta forma de inteligencia se centra en hechos de la experiencia anterior. Tanto la inteligencia fluida como la cristalizada comprenden la capacidad global para aprender, pensar, razonar y abordar problemas complejos. Las dos formas de inteligencia juegan roles complementarios. Mientras que la inteligencia fluida disminuye con la edad adulta, la inteligencia cristalina se fortalece con el tiempo.
