La foliculitis es una afección que se produce cuando una infección hace que uno o más folículos pilosos se inflamen. El efecto de la condición sobre el crecimiento del cabello varía según su gravedad y el tipo de foliculitis. Es posible que el crecimiento del cabello no se vea afectado o que la afección pueda causar pérdida permanente del cabello y cicatrices.
La foliculitis puede clasificarse como fúngica, bacteriana, viral o no infecciosa. Las causas comunes de la foliculitis incluyen ropa apretada, afeitarse, picaduras de insectos o sentarse en una tina de agua caliente que no se limpió correctamente. Los síntomas pueden incluir erupción cutánea, sensación de picazón y granos o pústulas alrededor del folículo piloso. Una persona con síntomas debe evitar compartir cualquier cosa que use en su piel, como toallas, paños o afeitadoras.
Una persona puede tratar casos leves de foliculitis manteniendo el área afectada fresca y expuesta al aire fresco. La mejora generalmente ocurre dentro de unos pocos días, y la condición puede durar de siete a 10 días. La foliculitis fúngica tiende a tardar más en curarse que la foliculitis bacteriana. La crema hidratante, particularmente una con un agente antibacteriano, puede ayudar a tratar la condición. Los casos más graves pueden requerir antibióticos.
Los signos de una infección más grave incluyen fiebre superior a los 100 grados Fahrenheit, la afección que se propaga o reaparece después del tratamiento o la persona que desarrolla los forúnculos. En situaciones como esas, un médico debe ser notificado.