Hay tres descomponedores principales en la pradera: el escarabajo pelotero, el escarabajo carroñero y el gusano. Estos insectos ayudan al ecosistema de la pradera a descomponer los desechos dejados por las plantas y los animales. Tienen un papel importante que desempeñar en la red alimentaria del ecosistema, según Nature Works. Reciclan los residuos de plantas y animales en productos químicos útiles, como el carbono y el nitrógeno, que a su vez benefician tanto al aire como al suelo.
Según el experto en escarabajos, John Feehan, los escarabajos recolectan y comen los desechos de herbívoros y omnívoros, pero prefieren los de los herbívoros. También comen plantas en descomposición y hongos. El excremento recolectado por los escarabajos del estiércol también se utiliza para alimentar a sus crías.
A diferencia de los escarabajos peloteros, los escarabajos carroñeros se alimentan de cadáveres de animales muertos y en descomposición, lo que ayuda en gran medida al proceso de descomposición. También se les conoce como escarabajos enterradores porque cavan el suelo desde debajo de pequeños roedores muertos y entierran sus cadáveres en descomposición.
Nature Watch afirma que los gusanos devoran la materia animal y vegetal en descomposición. Son capaces de comer muy rápido e incluso producir su propio peso corporal en excremento cada día. Las lombrices de tierra son útiles para airear el suelo para permitir que el agua penetre y las raíces crezcan. A través de la descomposición, liberan nutrientes al suelo.