Los musulmanes creen que cuando una persona muere, su alma continúa viviendo de acuerdo con los hechos que realizaron mientras estaban vivos. Según el Islam, las buenas acciones beneficiarán al alma después de la muerte y las malas causará sufrimiento eterno.
El islam es una religión monoteísta basada en las enseñanzas y doctrinas con respecto a un ser supremo conocido como Allah. Los seguidores del Islam creen que el alma de una persona regresa al reino de Allah cuando muere. Por lo tanto, una persona debe fortalecer su espíritu haciendo buenas obras y orando regularmente. Aquellos que rechazan la religión en favor de las posesiones materiales y los placeres terrenales están condenados a sufrir eternamente después de la muerte.
En el Islam, el cielo se describe como un lugar de "jardines y ríos" y el infierno como un lugar hecho de "fuego". El Islam enseña sobre el Día del Juicio o la Última Hora, describiendo los eventos que tendrán lugar en la tierra antes de que Allah regrese para resucitar a las personas de la muerte y emitir el juicio final sobre todos los seres humanos. Los musulmanes creen que permanecerán en sus tumbas hasta este día. El Islam también enseña que Alá perdona a las personas que han vivido vidas malas y que los dejarán entrar en el paraíso una vez que hayan sido castigados y se hayan mostrado verdaderamente arrepentidos.