Un número de cosas como vidrio, lubricantes, componentes electrónicos, paneles solares y una variedad de equipos médicos están hechos de silicona. La mayoría de la arena que se encuentra en todo el mundo está compuesta principalmente de sílice, que es un óxido de silicio.
Uno de los usos más comunes del silicio es producir silicona, que tiene un gran número de usos. La silicona se encuentra en los implantes mamarios y en muchos otros dispositivos médicos. El silicio también se usa en computadoras y componentes eléctricos, la mayoría de los cuales no podrían funcionar sin chips semiconductores de silicio.
Mientras que la sílice es el componente principal del vidrio, el silicio también se usa para hacer vidrio óptico. Este tipo de vidrio óptico se encuentra en cables de fibra óptica y pantallas de cristal líquido (LCD), como las que se encuentran en televisores, teléfonos móviles y computadoras.
El silicio es un elemento clave en la recolección de energía solar, ya que sus propiedades fotovoltaicas le permiten generar electricidad cuando los átomos de silicio son excitados por los fotones de la luz solar. Además de generar electricidad, estos mismos paneles solares también se utilizan para calentar el agua.
El silicio también se encuentra en una gran cantidad de grasas, resinas, lubricantes e incluso en muchos productos para el hogar o de belleza, como champú, suavizante de telas, loción y antitranspirante.