Los mosquitos comen diferentes alimentos según el género y la etapa de la vida. Las larvas de mosquitos viven en estanques de agua estancados y consumen principalmente algas y organismos acuáticos microscópicos. Una vez que se crían, los mosquitos dejan de alimentarse hasta que se produce la metamorfosis y se convierten en adultos. Las hembras adultas se alimentan principalmente de la sangre de otros animales, mientras que los machos se alimentan de néctar de flores.
Todos los mosquitos comparten una serie de similitudes, como la necesidad de depositar sus huevos en el agua, pero existe una gran variación en los hábitos de las más de 2,500 especies de mosquitos que viven en todo el mundo. Por ejemplo, diferentes especies prefieren diferentes tipos de ambientes acuáticos para la deposición de huevos; algunos prefieren planicies de marea, mientras que otros prefieren pantanos. Algunas especies, como las del género Culex y Aedes, se alimentan frecuentemente de la sangre de los humanos. Sin embargo, los mosquitos Aedes no suelen entrar en las viviendas para alimentarse de las personas, mientras que los mosquitos Culex lo hacen regularmente.
Los mosquitos del género Anopheles son particularmente notables para los humanos: estos mosquitos pueden transportar y transmitir la malaria, que es causada por un pequeño parásito que vive dentro de la sangre humana. Cuando un mosquito pica a un humano infectado, algunos de los parásitos pueden viajar al estómago del insecto. Luego, cuando el mosquito pica a otra persona, algunos de los parásitos pueden invadir el torrente sanguíneo de la segunda persona.