La desertificación es un problema complejo con varias causas principales, que son: el sobrepastoreo, la eliminación de la cubierta vegetal, la recolección excesiva de leña, las prácticas agrícolas insostenibles y la tala excesiva de árboles. A medida que los lugares desérticos se convierten en tierras de cultivo Para sostener grandes operaciones agrícolas, el pastoreo excesivo es cada vez más problemático. La mayoría de los factores que contribuyen a la deforestación son provocados por el hombre, como el sobrepastoreo, y amenazan la vida de personas y organismos en las áreas afectadas.
Además del sobrepastoreo, la eliminación de la cubierta vegetal también presenta riesgos significativos, al librar a la tierra de sus defensas contra la erosión y la absorción de agua. La recolección de leña y el corte de madera también aceleran la deforestación, al eliminar las raíces profundas que absorben agua del suelo y lavar los suelos ricos en nutrientes. Por último, las prácticas agrícolas negligentes desperdician los recursos naturales y contribuyen a la deforestación.