Los saltamontes tienen alas muy fuertes que les proporcionan la capacidad de volar una gran distancia en busca de comida o de un compañero. Los saltamontes también pueden volar bastante alto teniendo en cuenta su gran tamaño.
Los saltamontes también tienen piernas muy poderosas, lo que les proporciona el impulso adicional que necesitan para despegar del suelo. Junto con la capacidad de volar y saltar, los saltamontes pueden hacer música frotando sus patas traseras contra sus alas anteriores. Los saltamontes con alas de la banda también crepitan, o hacen ruidos, cuando vuelan haciendo chasquear sus alas. El ruido no es muy melódico, pero a otros saltamontes no les importa. Si bien un saltamontes puede detectar la intensidad y el ritmo, no puede detectar el tono.
