París se llama la "Ciudad del amor" por varias razones, entre ellas, sus vistas, su idioma nativo y su popularidad como destino de luna de miel. Aunque otras ciudades a veces reclaman el mismo apodo, París gana su nombre como un lugar donde el romance florece.
Muchas parejas aspiran a ir a París en su luna de miel porque la ciudad es muy conocida por sus paseos románticos a lo largo del río Sena, la cafetería de la acera y, por supuesto, la Torre Eiffel brilla por la noche. La otra hermosa arquitectura, los encantadores hoteles y las bellas artes también ayudan a que la ciudad se gane su nombre y reputación. Las parejas enamoradas también disfrutan estando donde escuchan francés, el "lenguaje del amor", hablado a su alrededor.