El genocidio se produce debido a una variedad de razones, que incluyen un prejuicio extremo contra otras culturas o razas, la propaganda, el miedo a otras culturas o razas, un mayor sentido del nacionalismo e ideas mal informadas sobre cómo llevar a cabo un cambio social. Además, algunas culturas intentan crear leyendas de su propia crueldad.
Durante los años previos a la Segunda Guerra Mundial, el partido nazi en Alemania utilizó propaganda en los periódicos y la radio para vilipendiar al pueblo judío y restringir la influencia judía en las profesiones legales y médicas. Estas medidas ayudaron a poner un espectro de culpa dentro de la mente pública acerca de sus vecinos judíos.
En los casos de genocidio en Camboya y Ruanda, la cultura eliminada fue descrita por quienes están en el poder como alimañas, cucarachas y subhumanas. La destrucción de estas culturas se convirtió entonces en algo bueno para el mejoramiento de la sociedad.