Melquisedec es una figura bíblica que se encuentra en el Libro de Génesis, Salmos y Hebreos. Él era el rey de Salem y se llamaba sacerdote del Dios Altísimo, lo cual era inusual en una época en que el monoteísmo no era muy practicado. Algunos eruditos bíblicos han teorizado que Melquisedec era en realidad una versión temporal de Cristo en la tierra.
No hay detalles sobre la ascendencia de Melquisedec en la Biblia. De hecho, el Libro de Hebreos indica que no tiene fecha de inicio ni fecha de finalización. Aparece primero en Génesis 14, cuando lleva pan y vino a Abram (más tarde conocido como Abraham) después de que regresa de derrotar a un rey enemigo. Él ofrece una bendición a Abram. Muchos eruditos creen que Jesús se hizo cargo del sacerdocio que poseía Melquisedec, convirtiéndose en el poseedor del sacerdocio para siempre.
Varios grupos religiosos reconocen a Melquisedec como un santo. La mayoría de las denominaciones cristianas creen que el sacerdocio de Melquisedec fue mantenido por Jesucristo. Sin embargo, la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (mormones) cree que el sacerdocio todavía existe y se puede transmitir a miembros dignos de su iglesia. Creen que el sacerdocio se transmitió de Adán hasta Moisés. Moisés tenía la intención de pasar el sacerdocio a los israelitas, pero se les consideraba indignos de poseer el sacerdocio.
El sacerdocio de Melquisedec es la etapa superior del sacerdocio que se otorga a los miembros dignos de la iglesia SUD. Solo los hombres pueden ocupar el sacerdocio, y se prohibió a los afroamericanos mantener el sacerdocio hasta 1978. Una vez que se le confiere el sacerdocio, el hombre puede otorgar bendiciones del sacerdocio, especialmente a su esposa e hijos.