De acuerdo con RedBeacon, los problemas más comunes de calefacción central incluyen problemas de suministro de gas, conductos obstruidos o con fugas, luces piloto débiles y termostatos que funcionan mal. Los problemas de suministro de gas son responsabilidad de la empresa de servicios públicos, pero La responsabilidad financiera de otros problemas recae en el propietario.
Muchos sistemas de calefacción central que funcionan mal tienen conductos bloqueados o con fugas. Si el problema es un bloqueo, los animales muertos y los nidos de aves son los culpables. Los bloqueos impiden la circulación de aire adecuada y requieren atención profesional a menos que la obstrucción sea visible en la boca del conducto. Los conductos con fugas requieren siempre un diagnóstico y reparación profesional. El parche corrige las fugas menores, pero el reemplazo es la única opción para aquellos con agujeros graves u otros daños extensos.
Una luz piloto débil o inconsistente es un síntoma de un problema potencialmente peligroso. Sin una luz piloto fuerte y constante, un horno es ineficiente y poco confiable. Esto aumenta el riesgo de que se acumule monóxido de carbono letal en el hogar. La Asociación de Automóviles explica que el monóxido de carbono es invisible y no tiene olor. Los detectores de monóxido de carbono que funcionan con baterías son equipos de seguridad esenciales en los hogares modernos. Las luces piloto que funcionan correctamente queman un azul vibrante. Si la luz piloto parpadea o se vuelve amarilla, no espere a que suenen las alarmas de monóxido de carbono; busca ayuda profesional inmediatamente.