Los cerdos ruedan en el lodo principalmente para regular la temperatura de su cuerpo. Este comportamiento se conoce más comúnmente como "revolcarse".
Además de ofrecer protección contra los rayos del sol, una capa de lodo húmedo es crucial para mantener a los cerdos frescos en climas cálidos a través de la evaporación gradual. Este método es tan efectivo que algunos han sugerido que se debe revolcarse como la razón del limitado desarrollo evolutivo de las glándulas sudoríparas en cerdos.
Los cerdos también se revuelcan en climas más fríos, lo que indica motivaciones adicionales, como la eliminación de parásitos, y posiblemente marcar el territorio con olor. Por supuesto, los cerdos también disfrutan genuinamente de revolcarse por sí mismos, mostrando signos de angustia cuando los agricultores intentan frenar su comportamiento con medicamentos antiparasitarios o graneros con aire acondicionado.