Los Huskies aúllan por una variedad de razones, incluyendo ansiedad por separación, miedo o un deseo de atención. Los Huskies y otros perros también pueden aullar cuando sienten dolor.
Los perros que aúllan excesivamente cuando sus dueños no están en casa probablemente experimentan ansiedad de separación. Como animales de carga, los caninos frecuentemente sienten una ansiedad significativa cuando se los deja solos. Los perros también gritan en respuesta a otros perros aulladores que están dentro de su rango de audición. Ese rango suele ser mucho mayor que el rango de audición de los humanos. Los cuernos del tren, las sirenas y ciertos instrumentos musicales también pueden invocar el aullido de un perro.
Los dueños de mascotas cuyos perros aullan excesivamente primero deben descartar cualquier tipo de condición médica que pueda causar que el animal intente comunicar angustia a través de los aullidos. Un entrenador profesional de perros puede ayudar a identificar y abordar todas las otras formas de aullido excesivo.