Una llama de potasio es visible a través del vidrio de cobalto debido a las propiedades de absorción del color del vidrio azul. El vidrio de cobalto absorbe el color amarillo producido por la contaminación de sodio en una muestra, dejando solo la luz púrpura producida por potasio.
La llama amarilla de sodio y la llama roja de litio son más brillantes que la llama púrpura producida por el potasio, lo que convierte al vidrio de cobalto en una importante herramienta de diagnóstico para detectar potasio. Muchos otros iones metálicos se queman con una llama más tenue que el sodio, lo que también hace que el vidrio de cobalto sea útil en su detección.
Esta prueba de llama puede llevarse a cabo con un equipo mínimo, requiriendo solo equipo de laboratorio básico. Su simplicidad es otro contribuyente a su popularidad.