La globalización es buena porque proporciona al mundo mercados más eficientes, aumenta la competencia que conduce a mejores bienes, genera riqueza en todas partes del mundo y crea y estabiliza la seguridad. La globalización está creciendo constantemente a medida que la tecnología permite a las personas dentro de cada país comunicarse con personas que anteriormente estaban fuera de su alcance.
El mundo se está interconectando cada vez más a medida que los gobiernos trabajan juntos para resolver problemas globales. El proceso de globalización ha hecho que los mercados sean más eficientes, ya que las empresas y organizaciones han tenido que volver a aprender cómo crear un bien u ofrecer un servicio de la manera más eficiente para obtener una ganancia.
El aumento de la competencia es otro beneficio de la globalización. Con la aparición frecuente de nuevos productores, hay más personas y empresas compitiendo por una parte de la economía global. Esto lleva a mercados competitivos que ofrecen productos de mayor calidad y precios más accesibles.
Otro beneficio de la globalización es el cambio que ofrece a las personas en los países más pobres. Le da a esta gente la oportunidad, aunque quizás no tan grande como la oportunidad que tienen las personas en naciones más ricas, de vender bienes y obtener una ganancia que conduzca a una mayor distribución de la riqueza. La globalización también protege al mundo, ya que los países que dependen entre sí para la estabilidad de su economía tienen menos probabilidades de atacarse entre sí.
