El brazo de una persona no es igual a su altura. Los intervalos de brazos son más largos que la altura de aproximadamente 2 pulgadas en los machos adultos y aproximadamente .5 pulgadas en las hembras adultas.
Los niños de hasta 10 años y las niñas de hasta 11 años suelen ser más cortos que sus brazos. Las relaciones anómalas entre brazos y estatura pueden ser indicios de trastornos médicos, como el síndrome de Marfan y la homocistinuria. Sin embargo, las longitudes anormales de los brazos son normales en pacientes con deformidades de la columna vertebral, como la displasia espondiloepifisaria. Tales condiciones hacen que sea difícil levantarse adecuadamente, lo que da como resultado lapsos de brazos anormalmente largos.