El pragmatismo difiere del idealismo en su opinión de que el valor de una ideología o proposición está determinada por su efectividad y practicidad, mientras que el idealismo se ocupa principalmente del ideal o principal detrás de la proposición. El término idealismo puede Sin embargo, tienen varios significados diferentes, pero en la mayoría de las interpretaciones se refiere a un enfoque en las ideas, la imaginación o lo espiritual sobre la visión pragmática, que se concentra en la existencia tal como es, en lugar de cómo debería ser. Los pragmáticos ven la validez de una teoría basada en sus resultados o consecuencias en lugar de sus ideales y antecedentes subyacentes.
El punto de vista pragmático sostiene que las investigaciones sobre la naturaleza de las cosas y la existencia deben comenzar "en resolución de medios", que en latín significa "en medio de las cosas". El punto en el que comienza la investigación depende de ideas preconcebidas históricamente determinadas y condicionadas. Según el pragmatismo, la filosofía no precede al examen científico, sino que es continua con él. La filosofía no debe gobernar desde arriba, sino más bien extraer lo explícito de los estándares aceptados de las mejores prácticas actuales.
Como término filosófico descriptivo, "pragmatismo" apareció por primera vez en forma impresa a fines del siglo XIX cuando William James lo usó en un discurso dado en la Universidad de California. John Dewey fue un defensor más reciente del pragmatismo cuyos escritos tuvieron una influencia significativa en el pensamiento intelectual estadounidense durante gran parte del siglo XX.