El aceite de oliva estimula el crecimiento del cabello: reduce la pérdida del cabello al evitar que la hormona dihidrotestosterona, o DHT, se una al cuero cabelludo, y el aceite de oliva contiene propiedades antifúngicas y un humectante que también estimula la producción del cabello. El aceite de oliva ayuda a fortalecer las raíces del cabello y también a hacer que el cabello sea más brillante y suave. El aceite de oliva actúa como un acondicionador natural y proporciona humedad al cuero cabelludo, así como a las hebras del cabello.
Además de los agentes hidratantes, el aceite de oliva contiene propiedades antibacterianas que ayudan a combatir las condiciones comunes de la piel, como los piojos y la caspa, que también afectan la calidad del cabello. Si bien todos los aceites de oliva producen beneficios para el cabello, el aceite de oliva virgen extra es el menos procesado y la forma más pura de aceite de oliva.