Los dragones no viven en ninguna parte, porque el dragón es una criatura mítica. Los dragones han sido una parte importante del folklore en muchas culturas durante siglos. Los dragones suelen representarse como grandes lagartos que respiran fuego con alas similares a las de un murciélago.
En las culturas cristiana y de Oriente Medio, los dragones simbolizan el mal. Leyendas cristianas, como la historia de San Jorge, muestran al héroe matando a un dragón para triunfar sobre el pecado y el paganismo. El dios egipcio de la oscuridad y el mal fue representado como un dragón. En la cultura china, los dragones representan la prosperidad y la fertilidad. La familia real en la antigua China usó una imagen de un dragón como emblema real.
