Las características básicas de una civilización incluyen centros de población, arquitectura monumental, lenguaje escrito, distintos estilos artísticos, división del trabajo, un sistema de administración de territorios y división de clases sociales.
Los centros de población son generalmente grandes áreas pobladas por personas. Se conocen como áreas urbanas, y estos centros ayudan a las civilizaciones a desarrollarse.
Las civilizaciones intentan preservar su legado mediante la construcción de grandes estructuras o monumentos, como el Monte Rushmore, la Torre Eiffel y las pirámides.
La comunicación escrita es una característica importante de la civilización. Esta característica ayuda a crear sistemas de comercio y gobierno. La escritura permite a las personas expresar pensamientos y registrar el historial.
Un sistema de administración de territorios es otra característica básica de la civilización. Esto permite que la civilización gobierne sobre un área grande. Históricamente, hubo una variedad de métodos utilizados en este sistema, como la construcción de una red de caminos para mejorar la comunicación entre territorios distantes. La creación de carreteras también facilitó los viajes para los militares.
Las divisiones del trabajo requieren diferentes personas dentro de la civilización para realizar tareas especializadas. Por ejemplo, algunos miembros de la comunidad pueden cultivar, mientras que otros cazan, y tanto los agricultores como los cazadores pueden confiar en que otros miembros de la comunidad proporcionen la ropa ..
La división de clases sociales es otro aspecto básico de la civilización. Las clases sociales se clasifican por ingreso o por el tipo de trabajo que uno hace. Por ejemplo, la civilización occidental divide las clases económicas en una clase rica, clase media y pobre.