Los valores familiares se han definido como las lecciones que los padres enseñan a sus hijos sobre lo que es importante y valioso en la familia, como la buena moral y la autodisciplina. Aunque cada familia es diferente, otros valores familiares populares son la honestidad, la buena autoestima, la amabilidad, los buenos modales y una fuerte ética de trabajo.
Aunque las perspectivas están cambiando gradualmente, muchos de los valores que los padres quieren transmitir a sus hijos siguen siendo los mismos, y muchos padres hoy en día consideran que la religión o la espiritualidad son un aspecto importante de la crianza de sus hijos. La mayoría de los estadounidenses creen en la religión como la piedra fundamental para proporcionar a los niños una base moral, y más de la mitad de los estadounidenses pertenecen a una religión organizada; sin embargo, de los que pertenecen, menos del 30 por ciento asiste a los servicios semanalmente.
Las familias americanas también valoran la diversidad. Aquí, los padres practican lo que predican, ya que la gran mayoría informa sobre el tiempo dedicado a socializar con miembros de una raza, religión u origen étnico diferente. Sin embargo, cuando se mencionan los "valores familiares" en el contexto de la política estadounidense, la percepción de la gente de lo que significa el término parece cambiar. La unidad familiar, el matrimonio, la moral, la integridad y la religión todavía vienen a la mente, pero también lo hacen los asuntos políticos como el aborto, la atención médica, los derechos de los homosexuales y los impuestos.