Las características de un bioma de tundra incluyen áreas grandes y abiertas sin árboles; Nieve y temperaturas frías durante la mayor parte del año; poca lluvia y temporadas de crecimiento corto. La tundra es más común en el Ártico, pero también existe cerca de las cimas de las montañas altas.
La palabra "tundra" viene de "tunturi", una palabra finlandesa que se refiere a las llanuras sin árboles. La tundra es uno de los biomas más extremos de la Tierra, principalmente debido a sus duras temperaturas frías y la falta de agua dulce, lo que crea un entorno desértico. La tundra alrededor del Ártico tiene una temperatura promedio de 10 a 20 grados Fahrenheit.
El permafrost es una característica única de un entorno de tundra. El permafrost alcanza desde el suelo hasta más de 1,000 pies debajo de la superficie y está compuesto de suelo congelado y plantas muertas.
Pocas plantas viven en la tundra, ya que la temporada de crecimiento dura solo de 50 a 60 días en algunos lugares. Entre las plantas que viven en este entorno hostil se encuentran juncias, musgos de reno y hepáticas. Los osos polares, liebres árticas, bandadas de nieve, cuervos y abejorros árticos se encuentran entre la pequeña cantidad de animales que viven en los biomas de tundra. Los animales que viven en la tundra tienen adaptaciones especiales, como capas adicionales de grasa, que les permiten sobrevivir.