La forma más efectiva de mantener alejados a los mosquitos es usar un repelente de insectos que contenga DEET, un químico repelente de insectos que fue inventado por el Ejército de los EE. UU. y se ha usado en entornos militares desde 1946. El repelente ideal contiene al menos el 30 por ciento de DEET, aunque el 50 por ciento es común en las áreas tropicales.
Las espirales para mosquitos son inciensos en forma de espiral que contienen polvo de piretro, que expulsa a los mosquitos. Una bobina para mosquitos suele durar entre 6 y 8 horas, por lo que es importante planificar su uso prolongado.
El parche para mosquitos es otro elemento disuasivo que se puede usar para ahuyentar a los mosquitos. Estos parches emiten compuestos que están libres de toxinas, por lo que se pueden usar directamente en la ropa o en áreas propensas a la infestación. Según el fabricante, los parches para mosquitos hacen que sea extremadamente difícil para los mosquitos percibir y cazar humanos durante hasta 48 horas.
Otra forma de mantener alejados a los mosquitos es cubrir la mayor cantidad posible de piel desnuda. El uso de mangas largas y pantalones evita que los mosquitos sean atraídos a la sangre humana. Las mosquiteras se pueden usar en áreas calientes donde el exceso de ropa no es práctico. Debido a su pequeño tamaño y habilidades de vuelo débiles, los mosquitos no pueden volar en áreas ventosas, por lo que usar un abanico puede ser una excelente manera de disuadir a los mosquitos. También son repelidos por el humo, por lo que encender una fogata cuando sea posible es otra estrategia efectiva para combatir los mosquitos.