En la novela de Ray Bradbury "Fahrenheit 451", Guy Montag es el bombero cuyo trabajo es quemar libros. Él dice y piensa cosas que revelan serias y peligrosas dudas sobre la sabiduría de su trabajo.
Montag y los bomberos queman libros porque asumen que todos son malos. Sin embargo, Montag afirma: "No juzgues un libro por su portada", lo que significa que no debes asumir que todos los libros son malos, sino que deberías mirar las ideas dentro de las portadas y valorar el conocimiento que contienen.
A medida que Montag cambia en la historia, se vuelve más audaz y dice: "Cuando no tienes nada que perder, corres el riesgo que quieras". Se da cuenta de que su mundo es una pesadilla y vale la pena arriesgarse a cambiarlo.
Más tarde, mientras Montag busca racionalizar su deseo de dejar de quemar libros, piensa: "El sol ardía todos los días. El tiempo ardía ... El tiempo estaba ocupado quemando los años y la gente de todos modos, sin la ayuda de él". Así que si él quemó cosas con los bomberos y el sol quemó el Tiempo, ¡eso significó que todo se quemó! " Montag concluye que debe dejar de contribuir a la quema y destrucción de las cosas.