Algunas canciones famosas de ópera italiana incluyen "Nessun dorma", de Turandot de Puccini, "La donna e mobile", de Rigoletto de Verdi, "Ardon gl'incensi", de Lucia di Lammermoor de Donizetti, "Scuoti quela fronda di ciliegio" de Maducas de Puccini, "Vesta la giubba", de Pagliacci de Leoncavallo, "Che gelida manina", de La Bohéme de Puccini y "Recondita armonia", de Tosca. Italia tiene una historia de ópera vibrante y mundialmente conocida.
La canción en La Bohéme llega temprano en la ópera cuando Rodolpho toca la mano de Mimi mientras buscan la llave de su habitación, y él y él exclaman que hace frío. En Turandot, la amargada princesa Turandot da la orden de que a nadie en Pekín se le permita dormir hasta que se divulgue el nombre del príncipe que resolvió su enigma. En Rigoletto, el duque canta "La donna é mobile" que lamenta la falta de vida de las mujeres.
En Madama Butterfly, la heroína y su doncella cantan alegremente sobre el regreso del teniente Pinkerton mientras decoran su casa con flores.
"Ardon gl'incensi" es de la famosa escena loca de Lucia di Lammermoor. En Pagliacci, la gran aria de Canio, "Vesta la giubba", expresa su amargura por tener que actuar como un payaso alegre incluso cuando su corazón se está rompiendo. En Tosca, el pintor Mario compara la belleza de Tosca y una mujer que ha estado orando en un santuario dedicado a la Virgen.