Una hoja de cálculo se utiliza para organizar y clasificar la información en columnas y filas fáciles de leer y comprensibles. Tanto las empresas grandes como las pequeñas pueden utilizar hojas de cálculo para realizar un seguimiento de las fechas importantes.
Las hojas de cálculo son ideales para almacenar grandes y pequeñas cantidades de datos en una ubicación centralizada. A menudo están formados por varias celdas que pueden contener cualquier cantidad de datos necesarios. Los datos pueden ser representativos de una variedad de cosas, incluyendo información de precios e información sobre diferentes gastos de negocios. Las celdas se pueden combinar fácilmente en una hoja de cálculo para ayudar a alcanzar una cierta suma y hacer que la adición de diferentes conjuntos de datos sea más fácil de hacer. Las hojas de cálculo también pueden clasificar y filtrar los datos de acuerdo con las diferentes opciones de codificación que se utilizan en la aplicación.
La presentación de datos que tiene una gran cantidad de números para muchas personas diferentes a veces puede ser difícil, pero las hojas de cálculo son una ubicación centralizada que puede ser analizada por cualquiera que la haya visto. Las hojas de cálculo son ideales para presentar datos a empleados, miembros de la junta e incluso a supervisores. Es una forma de compartir toda la información contenida en un conjunto de datos entre muchas personas sin la necesidad de varios archivos y puntos de acceso.